Recomendaciones para evitar la fatiga visual en la vuelta a la rutina

El Instituto Oftalmológico Fernández-Vega comparte 5 recomendaciones para beneficiar la salud ocular y prevenir la vista cansada.

La vuelta a la rutina es sinónimo de pasar de nuevo en torno a siete horas diarias frente a las pantallas del ordenador y el móvil, ya sea estudiando o trabajando en la oficina. Aunque las pantallas no son malas en sí mismas para los ojos, pueden provocar fatiga ocular, ya que tendemos a parpadear con menos frecuencia cuando estamos centrados y, por tanto, la lubricación del ojo es menor. La sequedad ocular favorece la aparición de irritación, visión borrosa, sensación de arenilla en el ojo, enrojecimiento e incluso dolores de cabeza y dificultad para leer.  

“Por lo general, la fatiga ocular no es grave y suele desaparecer cuando descansamos la vista. Sin embargo, a veces, los síntomas pueden estar relacionados con patologías más graves. En ese caso, es fundamental acudir a revisiones oftalmológicas”, explica el Dr. Jesús Merayo Lloves, director del Instituto Universitario Fernández-Vega. “La exigencia de las actividades intensivas cuando usamos la visión de cerca y el esfuerzo que hacen los ojos cuando realizamos tareas frente a las pantallas también pueden estar relacionados con el aumento de la prevalencia de la miopía, cuya incidencia ha crecido considerablemente en los últimos años y que, de acuerdo con la Organización Mundial de la Salud, afectará al 52% de la población mundial en 2025”.

Recomendaciones clave para beneficiar la salud ocular

Para evitar las molestias que puede generar el uso prolongado de pantallas en el día a día, los oftalmólogos recomiendan seguir 5 recomendaciones clave para beneficiar la salud ocular y prevenir la vista cansada:

  1. 1. Realizar pausas siguiendo la regla ‘20-20-20’. Cada 20 minutos de actividad, se necesitan 20 segundos de descanso y mirar a seis metros de distancia (20 pies). Fijar la vista en el infinito durante unos segundos es esencial para que la vista descanse y se relajen los músculos de los ojos.
  1. 2. Tener una iluminación adecuada. Es necesario contar con el contraste adecuado entre la iluminación ambiente (que ha de ser cálida) y la pantalla. De este modo facilitamos no forzar la vista.
  2.  
  3. 3. Parpadear más a menudo y no abusar del tiempo de exposición ante las pantallas para mantener los ojos hidratados de forma natural. Además, factores como el aire acondicionado y la calefacción también provocan sequedad ocular, por lo que es recomendable controlar la humedad relativa y usar lágrimas artificiales para hidratar.
  4.  
  5. 4. Mantener una distancia adecuada de la pantalla, al menos de entre 50 y 60 cm. En adición, tener una correcta posición ergonómica, con la espalda erguida, los pies apoyados en el suelo y un plano de lectura de 20 grados de inclinación permite evitar la progresión de la miopía y el ojo seco, pues el párpado superior cubrirá gran parte del globo ocular mientras dirige la mirada hacia el plano inferior. 
  6.  
  7. 5. Realizar visitas periódicas al oftalmólogo. De esta manera, el especialista puede verificar si hay necesidad de usar lentes para relajar el esfuerzo visual continuado. Asimismo, puede realizar un diagnóstico temprano en caso de estar desarrollando una patología y, si es necesario, implementar un tratamiento oportuno.