13 DE JUNIO: DÍA MUNDIAL DEL CÁNCER DE PIEL

Prevenir el cáncer de piel evitando las quemaduras en los niños

El uso adecuado de los fotoprotectores es un arma fundamental frente al cáncer cutáneo.

Un año más siguen aumentando los casos de cáncer de piel en España. Está previsto que en 2023 más de 8.000 pacientes sean diagnosticados de melanoma, según datos de la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), y 78.000 de cáncer de piel no melanoma¸ según la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV). Sin embargo, el cáncer de piel es un tipo de tumor que podría evitarse en más del 95% de los casos con unas medidas de prevención básicas y que están al alcance de cualquier paciente.

La sobreexposición al sol y tener quemaduras reiteradas en las mismas zonas de la piel son dos de las principales causas de la aparición del cáncer de piel. Si las quemaduras se producen en las primeras décadas de la vida, el riesgo de desarrollar un cáncer cutáneo es mayor.

“El daño solar que provocan las quemaduras reiteradas llega hasta el ADN celular, al ser este acumulativo. Lo que significa que la protección natural que la piel nos presta frente a los rayos UVA y B no es tan eficaz, con el aumento de la posibilidad de que aparezca un cáncer de piel hasta 20 o 30 años después de que se hayan producido las lesiones” explica el Dr. Miguel Sánchez Viera, director del Instituto de Dermatología Integral.

En los tres primeros años de vida se debe evitar la exposición solar, medida que debe ir siempre acompañada del uso de fotoprotectores de índice alto durante todo el año. La piel ​no está totalmente desarrollada en los primeros años de vida, por lo que no protege de forma eficaz de los daños solares. Además, es en las primeras dos décadas de la vida cuando se producen mayor número de quemaduras solares, especialmente en la adolescencia “cuando no se tiene conciencia del peligro que esto puede suponer y cuando, además, prima la idea de que estar bronceado es sinónimo de belleza” matiza el director de IDEI.

¿Cómo aplicar el protector solar?

 

El otro gran factor de riesgo para desarrollar un cáncer de piel es el uso inadecuado que, en muchos casos, se hace de los fotoprotectores solares. A pesar de las campañas de que se van realizando cada año por parte de los dermatólogos, sigue siendo una asignatura pendiente. Estas normas pueden ser de gran ayuda:

  • - Aplicar el fotoprotector media hora antes de la exposición solar. De esta forma sus principios activos tienen tiempo de “hacer su trabajo” y eviten que nos quememos al ir a la playa, piscina, montaña, dar un paseo o hacer ejercicio al aire libre.
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  • - Ser generosos con la cantidad de fotoprotector empleada. Se recomienda usar 2 mg por cada centímetro cuadrado de piel, es decir, unos 30 mg cada vez que aplicamos la crema. La crema solar debe cubrir todas las partes del cuerpo por igual, ya que todas son susceptibles de sufrir una quemadura.
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  • - Reaplicar a lo largo del día. El fotoprotector debe reaplicarse cada dos horas, ya que su eficacia va desapareciendo. Pero si nos bañamos o sudamos mucho, debe volver aplicarse inmediatamente para que el agua o el sudor no hagan un efecto lavado y se eliminen de la piel.
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  • - Usar fotoprotector solar durante todo el año. Lo principal es saber que todas las personas deben utilizar fotoprotector solar no solo en verano, sino durante todo el año, ya que estamos sometidos a sus rayos ultravioleta durante 12 meses. En los meses de más calor, que abarcan la primavera y el verano, hay que utilizar un factor de protección 50, incluso cuando nuestra piel ya está un poco bronceada, ya que nos protegerá de posibles quemaduras. El resto del año, podemos utilizar un factor 30 en las horas centrales del día, si, por ejemplo, vamos a hacer deporte o vamos a estar bajo el sol muchas horas. De esta forma conseguiremos evitar no solo las quemaduras, sino también un envejecimiento prematuro (manchas, arrugas, flacidez y deshidratación).
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  • - Aplicarlo después del resto de cremas. Debe ser utilizado siempre después de cremas de cuidado de la piel y del maquillaje, como última capa. Si se utiliza al principio, se altera su efectividad.

Otras medidas para prevenir el cáncer de piel

 

  • - Decir no a las cabinas de rayos UVA. Está demostrado que el uso de estas cabinas es un altísimo factor de riesgo para el desarrollo de un cáncer de piel. “Si se quiere estar bronceado y no dañar la piel, es mejor optar por usar autobronceadores (crema, espray, toallitas o aplicados en centros de estética especializados).
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  • - Autoexploraciones. Se deben realizar como mínimo cada dos meses y revisar todas las partes del cuerpo, bien con la ayuda de un espejo o de otra persona. La regla del ABCDE fundamental para detectar cambios o nuevos lunares. A significa asimetría; B, corresponde a bordes irregulares; C se interpreta como cambios en el color; D es un diámetro superior a 0,6 cm; y E de evolución, es decir, un lunar que cambie de tamaño, forma o color en poco tiempo.
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  • - Revisiones dermatológicas periódicas. Es recomendable que se hagan anualmente, a menos que se detecte algún cambio o síntoma anormal en un lunar, como que pique o sangre. La dermatoscopia digital permite hacer un mapeo total del cuerpo y comparar los lunares y manchas sospechosos año a año. El uso de la dermatoscopia y el mapeo corporal permite un diagnóstico mucho más precoz del cáncer de piel, tanto melanoma como no melanoma. Es una de las herramientas más eficaces para la detección del cáncer de piel que tenemos actualmente.
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“Estas medidas preventivas conseguirían que más del 95% de los casos de cáncer de piel se eviten o se curen con mínimas secuelas para los pacientes” afirma el Dr. Sánchez Viera.