¿Sabes qué son los Green Smoothies?

Como su propio nombre lo indica, los Green Smoothies son batidos de color verde. Se hacen mezclando verduras de hoja verde, frutas, alguna semilla y algún fruto seco; pero fundamentalmente son de verdura y fruta.

En la cultura occidental estamos acostumbrados a hacer batidos de frutas, pero nunca habíamos oído hablar de mezclarlas con las hojas verdes de las verduras, una novedad que cuida nuestra salud, pues lo mejor de estos batidos es que son muy sanos. Así que este verano, apúntate a la moda de los Green Smoothies.

Ventajas

Es una manera muy fácil de comer verduras crudas, que es como mejor se pueden tomar para no mermar su poder vitamínico

Minerales, carbohidratos saludables y mucha fibra se suman a la lista de nutrientes que su organismo recibirá gracias a los Green Smoothies. Además, al batir las verduras, estas liberan muchos nutrientes que se perderían al comerlas enteras.

Si quieres librarte de los molestos kilos de más, cuenta con ellos. Ayudan a bajar de peso o a mantener el deseado de forma natural, sobre todo si se toman como desayuno. Y comenzando el día junto a ellos, contarás con una dosis extra de energía con la que afrontar mejor los quehaceres del día a día.

Un buen vaso es suficiente para saciarte, sin las temidas digestiones pesadas, pues el estómago los digiere fácilmente, y cuidando tu salud. No en vano, son antioxidantes, es decir, plantan cara al envejecimiento y a ciertas enfermedades. Además, limpian el cuerpo de las tediosas toxinas, aportan hierro y mejoran la piel.

Y si este verano, algún miembro de la familia tiene que estudiar, ten en cuenta que los Green Smoothies ayudan a concentrarse y a tener claridad mental.

Cómo hacer los Green Smoothies

  • Consigue una buena batidora, que rompa bien las hojas verdes.
  • Lava bien la verdura de hoja verde: espinaca (una de las mas recomendadas), acelga, brócoli, menta, perejil, lechuga (esta última tiene sus detractores), hoja del apio, endivia, cilantro, hoja de la coliflor, col rizada, berza y todas las hojas verdes que se te ocurran.
  • Lava y corte frutas diferentes, en la cantidad que estimes.
  • Añade un vaso pequeño de líquido: agua, leche, zumo o agua de coco. La última opción es muy buena e hidrata mucho la piel.
  • Le puedes añadir unos cuantos frutos secos o semillas de lino, sésamo (que tiene muchísimo calcio), etc.

Fuente: Eco-fresh