Intentar corregir la incontinencia urinaria antes de los 5 años puede provocar disfunciones

La maduración del Sistema Nervioso Central, que permite adquirir el control voluntario de la micción y la defecación, es diferente en cada niño

El Colegio Profesional de Fisioterapeutas de la Comunidad de Madrid (CPFCM) alerta de que intentar corregir la incontinencia urinaria antes de que el niño cumpla los 5 años puede generar entornos de presión y malestar en la familia que algunos niños superan, pero otros interpretan como un problema relacionado con la micción y provoca disfunciones a largo plazo.

El experto en Fisioterapia en Urología Pediátrica, Antonio Meldaña, explica que la maduración del Sistema Nervioso Central, que permite adquirir el control voluntario de la micción y la defecación, "es diferente en cada niño, pudiendo lograrse a edades tan diferentes como los 2-5 años".

"La exigencia de las escuelas para que un niño controle estos sistemas cuando comienza la educación infantil (3 años) es el origen de un gran número de disfunciones y problemas de los niños que acuden a consulta pasados los 5 años", añade.

Existen tratamientos comportamentales, conductuales, farmacológicos y fisioterapéuticos en función del tipo de pérdida de orina (enuresis) y su posible causa, aunque es muy importante que el niño no empiece a ser tratado antes de los 5 años.

En este sentido, Meldaña informa de que "la fisioterapia en el campo de la uroginecología, asociada generalmente a las mujeres, aporta muchos beneficios a niños que sufren disfunciones relacionadas con el tracto urinario inferior, sin causar además ningún tipo de efecto secundario".

"Las patologías deben de ser diagnosticadas por pediatras, urólogos y neurólogos y, a partir de ahí, el fisioterapeuta puede actuar para tratar disfunciones del tracto urinario inferior como la hiperactividad vesical, la micción no coordinada, la enuresis, la encopresis o defecación involuntaria infantil sin causa patológica, la incontinencia fecal  o, incluso, algunas infecciones urinarias", explica.

Tratamiento de fisioterapia

El tratamiento de fisioterapia que se realiza en estos niños se inicia con registros de la ingesta hídrica, de micciones y episodios de incontinencia. Además, se utiliza el tratamiento con biofeed-back para conseguir que el niño o niña tenga un correcto control de los esfínteres.

Esta técnica consiste en la colocación de pegatinas que registran la actividad de la musculatura del suelo pélvico del niño. Posteriormente, mediante juegos en el ordenador se consigue que el niño aprenda a relajar y contraer la musculatura, si fuera necesario. En ocasiones, si se precisa, se aplican pequeñas corrientes eléctricas para neuromodular la musculatura dependiendo del tipo de enuresis del menor.