Compras online: consejos para padres con hijos internautas

La probabilidad de que los menores accedan a Internet y se topen con sitios de pago es cada vez más elevada

Tusted Shops, empresa especializada en la certificación de tiendas online en Europa, ha elaborado una serie de consejos con algunas cuestiones habituales que se formulan muchos padres a la hora de controlar el uso de Internet que hacen sus hijos menores de edad y, uno de los temas más actuales, su acceso a las compras online.

Los llamados micropagos, por ejemplo, son los grandes protagonistas, pero para nadie es ajena la situación en la que un niño, al jugar con el teléfono de su padre, confirma la compra de un nivel extra en un juego de moda. En el caso habitual de que el progenitor tenga vinculada su tarjeta de crédito con la tienda de aplicaciones de su dispositivo, sólo se necesitarán un par de clics en la pantalla por parte del niño para realizar el pago. Sin contraseñas, normalmente almacenadas en el dispositivo por defecto y, en ocasiones, sin requerir confirmaciones, el cargo se realizará en su cuenta bancaria.

Situación

La practicidad de internet es, a todas luces, algo incuestionable en la época actual. Ha modificado nuestra forma de vida y comportamiento, como en su día lo hicieron la prensa, la radio o la televisión, con la diferencia de que la red aglutina todos los medios anteriores, además de todos los servicios que imaginemos, con sus respectivas ventajas e inconvenientes. Tanto es así, que se ha posicionado como un medio preferente para muchos a la hora de realizar sus compras, sean habituales o no.

Con dos de cada tres hogares "conectados" en España, el número de internautas supera la cifra récord de los 29 millones de personas de 10 o más años. Esta cifra supone un crecimiento del 16,2 por ciento con respecto a los datos de 2010.

Las probabilidades de que los menores accedan a Internet y se topen con sitios de pago es cada vez  más elevada. Al amplio parque de conexiones en el hogar hay que añadirle la proliferación de los smartphones, tablets y demás dispositivos electrónicos con Internet. Esta situación se acrecienta aún más si se destaca que el aprendizaje de estos dispositivos se hace a edades más tempranas. Por ello, y ante la imposibilidad de aislar a los niños para evitar el problema, la mejor solución es hacerle frente y adelantarse a estas situaciones.

"Como sociedad digital, que un menor se encuentre con un juego o servicio que solicita un desembolso económico mientras utiliza internet no es tan extraño como hace unos años", afirma Jordi Vives, responsable de Trusted Shops en España. "Por ello, debemos hacerles partícipes de la tecnología, de la misma manera que enseñamos el resto de cosas, ayudándoles a normalizarlo y enseñarles a utilizarlo de forma responsable a lo largo de su infancia y adolescencia".