Niños alérgicos al huevo

Uno de cada cinco niños con alergia al huevo mantendrá su alergia en el futuro y sus reacciones serán más severas, según un documento de consenso publicado por la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Alergia y Asma Pediátrica (SEICAP). La cifra de niños que no la superan ha aumentado en los últimos años y la única opción para conseguirlo es la Inducción Oral a la Tolerancia (ITO), una terapia que consiste en la ingesta de cantidades crecientes y de manera progresiva de proteínas de este alimento.

"Los pediatras alergólogos de SEICAP son pioneros en el uso de esta técnica con la que se han alcanzado cifras de éxito de más del 80 por ciento de los casos", explica el doctor Luis Echeverría, coordinador del grupo de trabajo de alergia alimentaria de esta sociedad científica. Con esta terapia se puede conseguir una tolerancia total o parcial con disminución de síntomas en caso de trasgresiones.

"Los niños que no superan la alergia, ven afectada su calidad de vida y la de los que le rodean, ya que sus proteínas están presentes en muchos productos que forman parte de la dieta y siempre habrá riesgo de que se desarrolle una reacción alérgica, de hecho es una de las causas más comunes de la anafilaxia severa", asegura.

Síntomas

La manifestación clínica de alergia al huevo está relacionada con la edad que tiene el niño y puede variar según la forma en la que se prepara: ya sea cocido, crudo, en yema o en clara, comenta el doctor Echeverría.

Los síntomas generalmente son causados por la ingesta oral o por su presencia en otros alimentos como alérgeno oculto, aunque pueden también ser producidos por contacto con la piel de forma directa o indirecta (besos, caricias, juegos y la exposición a las partículas volátiles de huevo batido).

Entre los síntomas que suelen aparecer están el eritema, purito, urticaria, náuseas, vómitos, dolor abdominal, sibilancias o disnea y la anafilaxia.

Máxima atención a las comidas

El entorno del paciente, la familia y la escuela deben recibir formación sobre la prevención y la gestión de las posibles reacciones adversas en los niños con alergia al huevo. "Se debe maximizar la vigilancia sobre ellos y comprobar cuidadosamente el etiquetado de los alimentos procesados", aconseja este pediatra alergólogo.