La radioterapia, sola o asociada a otros tratamientos, contribuye al 40% de las curaciones de cáncer

La población debe saber y poder preguntar en qué casos la extirpación se puede sustituir por la radioterapia

El cáncer es una de las enfermedades que más muertes ocasionan en el mundo y en España; de hecho, es responsable del 27,5% de los fallecimientos que se produjeron en nuestro país en 2012.

Según el doctor José López Torrecilla, presidente de la Sociedad Española de Oncología Radioterápica (SEOR) y jefe del Servicio de Oncología Radioterápica del Hospital General Universitario de Valencia, "aproximadamente, entre el 50 y el 55% de los pacientes con cáncer recibe radioterapia en algún momento de su vida. La mayor parte lo hace tras el diagnóstico, aunque algunos pueden llegarla a recibir tras la aparición de metástasis para aliviar los síntomas que produce la enfermedad".

Hoy en día, el cáncer se cura en el 50-60% de los pacientes; la radioterapia, sola o asociada a otros tratamientos, contribuye al 40% de las curaciones, aunque su porcentaje de éxito es variable dependiendo de la localización del tumor y del estadio de la enfermedad.

Así, por ejemplo, los tumores de mama diagnosticados precozmente y tratados con una cirugía limitada, conservando el pecho y posteriormente con una radioterapia pueden tener un control de la enfermedad superior al 95%. Sin embargo, señala este experto, "en otros tumores más avanzados este tratamiento va tener como único objetivo aliviar el dolor o cortar la hemorragia y ello se consigue en el 90% de las ocasiones".

La puesta al día de la tecnología, clave para el abordaje radioterápico del cáncer

La Oncología Radioterápica depende en gran medida de una serie de equipos de tratamiento que evolucionan continuamente y cuya renovación periódica es obligatoria para poder aplicar las técnicas de tratamiento más adecuadas a los conocimientos que van mejorando sobre el crecimiento y extensión del cáncer.

A pesar de ello y según este experto, "la coyuntura económica ha retrasado la renovación de equipos de tratamiento y la estandarización de los sistemas de información en todos los servicios de Oncología Radioterápica".

Es más, explica el Dr. López Torrecilla "los equipos de radioterapia deberían reponerse cada 10-12 años, máximo 15, porque a pesar de ser seguros, por el mantenimiento y los controles dosimétricos a los que son sometidos continuamente, los avances tecnológicos hacen que no sean adecuados para los tratamientos más avanzados que deben aplicarse en algunas localizaciones tumorales".

En concreto, un análisis de los recursos disponibles en todos los hospitales españoles llevado a cabo por la SEOR desvela que el 30% de los equipos tienen más de diez años, e incluso un 12% tiene más de 15 años.