Las nuevas tecnologías favorecen la aparición de violencia de género a edades más tempranas

Para los agresores, lo fundamental es «controlar» a la pareja y esto es más fácil con las redes sociales y los smartphones.

Las nuevas tecnologías desempeñan un papel cada vez más importante en las relaciones que establecen los adolescentes con otros chicos y chicas. Lamentablemente las convierte también en herramienta que facilita nuevas vías para el ejercicio de conductas violentas en la pareja.

Olga Barroso, coordinadora y psicóloga de la Unidad de Atención Especializada para mujeres adolescentes víctimas de violencia de género de la Dirección General de la Mujer de la Comunidad de Madrid, explica que "no ha cambiado tanto el patrón de agresión entre jóvenes y adolescentes. Lo fundamental es «controlar» a la pareja y esto es más fácil con las redes sociales y los smartphones. Los agresores pueden pedir «pruebas» gráficas, ubicaciones y obligar a mantenerse «en línea»".

Según dos estudios promovidos en 2013 por la Delegación del Gobierno para la Violencia de Género, un 61 por ciento de las jóvenes han sido víctimas de la violencia machista a través del móvil y las redes sociales y un 36 por ciento han sido destinatarias de mensajes que les han hecho "sentir miedo".

"La juventud tiene una percepción del peligro muy baja y en ocasiones no consideran conductas de riesgo el consumo de drogas que han comprado por internet o responder a un whatsapp en el que se las insulta", señala Barroso. "En nuestro centro tratamos siempre de dejar claro a las chicas dos cosas: que un insulto es una forma de violencia, que nadie merece recibirlo y nadie tiene derecho a ejercerlo; y que deben dar valor a lo que sienten, ya sea tristeza, malestar o miedo y pedir ayuda independientemente de contar o no con la aprobación de su entorno".

En ocasiones las víctimas son forzadas a probar nuevas sustancias o a hacer cosas que no desean. La presión y exigencia que reciben de la pareja puede desembocar a corto plazo en trastornos adaptativos y depresivos o en alteraciones de la conducta alimentaria como forma de buscar cierto control sobre su cuerpo.

Psiconautas duales

Los psiconautas son aquellas personas que buscan expandir o explorar su conciencia a través del uso de sustancias psicotrópicas. Suelen buscar y probar sustancias novedosas a través de la red, no necesariamente adictivas, que pueden ser legales o ilegales.

Tal y como comenta la doctora Helen Dolengevich, del Hospital Universitario del Henares en Madrid, "es una nueva forma de comportamiento en la red que puede llegar a ser delictiva. Los productos que se están vendiendo por la red son sintéticos, desconocidos muchos de ellos, y otros no se pueden encontrar en la calle. Las páginas web donde se encuentran son atractivas, normales y, sin embargo, detrás hay un mundo delictivo, de adicción, que las autoridades están persiguiendo de forma continua".

En esta misma línea, "debido a que algunas sustancias sí son legales en muchos países, es posible comprarlas a través de internet de forma sencilla, pagando con la tarjeta de crédito y recibiendo la mercancía en el domicilio. Otra cosa es comprar drogas ilegales, lo cual evidentemente sí es un comportamiento delictivo. Traspasa lo sanitario porque se busca continuamente cómo regular y prohibir estas drogas, pero el resultado es inútil porque cambian constantemente", insiste la doctora.

El perfil del consumidor lo dibujan principalmente varones de entre 20 y 30 años con estudios que desean descubrir nuevas percepciones del mundo con un nivel de conciencia alterado. En los últimos tiempos, entre el público consumidor encontramos también mujeres y jóvenes inexpertos. "Lo importante es tratar de educar para poder prevenir el consumo de sustancias psicotrópicas a través o no de internet. Muchas veces el hecho en sí no se puede evitar, pero con información y formación se puede ayudar a un uso responsable y con conocimiento, destaca Dolengevich. Sería conveniente poner en marcha talleres o charlas donde se transmita el riesgo de consumir estas sustancias".

Por último, merece la pena señalar el potencial de abuso y riesgo de intoxicación que se asocia a estas sustancias (herbales, químicas, sintéticas o farmacéuticas) cuyos efectos pasan por la estimulación, sedación, alucinación, etc. y que dificultan el diagnóstico de intoxicación por una sustancia en particular. Además, entrañan riesgo grave para la salud física y mental. "En ocasiones observamos crisis convulsivas, problemas cardiovasculares e incluso pueden causar la muerte".