Investigadores, oncólogos, dermatólogos y pacientes reclaman más recursos y coordinación en el tratamiento del melanoma

El Informe para un mejor abordaje del melanoma aboga por fomentar la investigación básica y clínica en España, facilitar la colaboración entre profesionales sanitarios, fomentar campañas de prevención y potenciar el papel de las asociaciones de pacientes

Investigadores españoles, oncólogos, dermatólogos, patólogos y pacientes con melanoma reclaman más recursos y más coordinación en la investigación, el diagnóstico y el tratamiento de esta grave enfermedad, de la que cada año se diagnostican más de 3.000 casos en España, un tercio de ellos en fase avanzada. Así lo han puesto de manifiesto en la presentación del Informe para un mejor abordaje del melanoma, en cuya elaboración han participado el Centro Nacional de Investigaciones Oncológicas (CNIO), la Sociedad Española de Oncología Médica (SEOM), el Grupo Español Multidisciplinar del Melanoma (GEM) y la Academia Española de Dermatología y Venereología (AEDV).

El informe, que ha sido patrocinado por Bristol-Myers Squibb, aborda aspectos como la prevención del melanoma, el tratamiento, el acceso de los pacientes a las nuevas opciones terapéuticas, la investigación básica y clínica y la formación de los profesionales sanitarios. En todos estos ámbitos, los expertos participantes en la elaboración del informe han identificado áreas en las que es necesario actuar con el objetivo final de mejorar la atención que reciben los pacientes afectados por el melanoma en cualquiera de sus fases.

"Hasta hace unos años el melanoma era considerado una especie de 'caja negra', porque desconocíamos cómo se inicia, cómo progresa y, sobre todo, por qué es tan agresivo", explica la doctora Marisol Soengas, Jefa del Grupo de Melanoma del CNIO, y Directora del Programa de Patología Molecular en este centro. No obstante, considera que en los últimos diez años el melanoma ha pasado a ser una de las patologías que está suscitando mayor interés y entusiasmo entre investigadores y oncólogos. "Se están descubriendo nuevos fármacos que, por primera vez, mejoran la calidad de vida de los pacientes, pero este esfuerzo requiere la unión de expertos de múltiples disciplinas, una financiación sostenida y un apoyo institucional claro y directo, que es lo que reclamamos", añade la doctora Soengas.

"El melanoma hoy día acaba en España con la vida de dos personas cada día y, por lo tanto, es una enfermedad que nos preocupa y contra la que debemos luchar", afirma el doctor Salvador Martín Algarra, presidente del Grupo Español Multidisciplinar del Melanoma (GEM) y oncólogo de la Clínica Universitaria de Navarra. "En los últimos años ha habido una explosión de investigaciones en torno al melanoma y de datos realmente prometedores, pero debemos seguir investigando y aumentando nuestros esfuerzos para llevar el resultado de esas investigaciones a quienes más lo necesitan, que son los pacientes", sostiene este experto.

Así lo señala también Víctor Rodríguez, director del GEPAC: "El informe pone en evidencia las carencias que existen para los afectados por melanoma". En su opinión, el documento presentado hoy sienta las bases para ofrecer una atención integral a estos pacientes oncológicos "que cubra todos los aspectos de la enfermedad".

El informe propone, entre otras cosas, crear estructuras coordinadas de diagnóstico y tratamiento del melanoma en los hospitales españoles, fomentar un abordaje multidisciplinar del melanoma, integrando a todos las especialidades implicadas en su diagnóstico y tratamiento (dermatología, anatomía patológica, cirugía y oncología médica), y unificar los diferentes registros de melanoma existentes en España, así como fomentar su uso, para obtener una visión más completa y real de esta enfermedad en nuestro país.

Más recursos para la investigación

Los autores del informe piden dotar de más recursos y medios a la investigación básica y clínica en melanoma, fomentar la colaboración entre investigadores, compañías farmacéuticas y administraciones para llevar los avances de la investigación a la práctica médica y crear redes de investigación similares a las que existen en el cáncer de mama y en otras patologías. En este sentido, la doctora Soengas destaca la importancia de la creación de INNOMELANOMA, un grupo colaborativo multidisciplinar, primero de este tipo en España, que integrará actividades de investigación en los campos de imagen molecular, nanomedicina y nuevas tecnologías aplicadas al melanoma.

Para los expertos que han elaborado el informe, la laguna en la investigación básica y clínica sobre el melanoma en España se refleja en carencias que afectan tanto al diagnóstico como al tratamiento de los pacientes, especialmente aquellos en fases avanzadas de la enfermedad. "No obstante, cada vez hay más avances en este campo que nos ayudan a disponer de equipos de diagnóstico y de herramientas moleculares que nos permiten distinguir con mayor precisión las lesiones benignas de los melanomas malignos", aclara la doctora Soengas.

La Jefa del Grupo de Melanoma del CNIO subraya también que este año se han aprobado en Estados Unidos y la Unión Europea nuevos tratamientos que prolongan de forma significativa la vida media de los pacientes con melanoma metastásico.

"Tenemos nuevos tratamientos que actúan por diferentes vías, como las dianas terapéuticas o la inmunoterapia, y que están teniendo un impacto claro en los pacientes con la enfermedad más avanzada, el melanoma metastásico", apunta el doctor Martín Algarra.

Formación y prevención

El informe también dedica parte de su análisis a la formación de los profesionales sanitarios, y destaca la necesidad de implantar estrategias de formación continuada que faciliten un abordaje multidisciplinar del melanoma, lejos del enfoque fragmentario actual. Además, insiste en la necesidad de incrementar la formación sobre el melanoma entre los profesionales de Atención Primaria ya que, como 'puerta de entrada' al sistema sanitario, desempeñan un papel fundamental en la detección precoz de la enfermedad.

Por último, propone fomentar el asociacionismo de los pacientes con melanoma, de forma que su voz permita "dotar de visibilidad a una enfermedad que, hasta el momento, ha sido poco escuchada y atendida", según señala el presidente del GEM.

"Las asociaciones de pacientes desarrollan un papel fundamental para ofrecer soporte integral a los afectados por cáncer", afirma Víctor Rodríguez. "Desde las asociaciones se ofrece apoyo psicológico y social, información sobre los tratamientos y se vela por los derechos y necesidades de los pacientes", añade el director de GEPAC. Por este motivo, desde el GEPAC se está impulsando la creación de una Asociación de Pacientes Afectados por Melanoma que aglutine a todas las personas que sufren esta enfermedad en España y cuyo objetivo será, entre otros, demandar una mejor atención para los pacientes.

El melanoma en España

Cada año se diagnostican en España 3.200 nuevos casos de melanoma, un tipo de cáncer de piel que se origina en los melanocitos, las células de la piel encargadas de producir melanina. Este tipo de tumor es el responsable del 80% de los fallecimientos por cáncer de piel.

Este tipo de cáncer puede afectar a cualquier persona y en cualquier edad, si bien es más habitual en personas con piel clara y a partir de los cincuenta años. En los hombres suele localizarse en el tronco, mientras que en las mujeres aparece con mayor frecuencia en las piernas. La localización del melanoma en el tronco y las extremidades también es más habitual en pacientes jóvenes, mientras que en los de mayor edad el tumor suele aparecer en la cabeza y el cuello.

La principal opción de tratamiento para el melanoma en fases iniciales es la extirpación quirúrgica del tumor y, en función de sus características, inmunoterapia. Si el tumor se detecta a tiempo, las tasas de supervivencia tras la extirpación son altas. En el caso del melanoma avanzado: la quimioterapia, radioterapia e inmunoterapia han resultado tradicionalmente poco eficientes. Afortunadamente, la investigación básica ha permitido el desarrollo de fármacos que por primera vez aumentan la vida media de ciertos grupos de pacientes.