Los europeos manipulamos en el trabajo más de 100.000 sustancias potencialmente neurotóxicas

Varios factores tóxicos se han relacionado con un mayor riesgo de padecer dolencias neurológicas como Parkinson o Alzheimer

Sólo  se  han  estudiado  alrededor  de  1.000  sustancias  para  conocer su  potencial neurotoxicidad  y, sin embargo,  circulan  en  el  mercado  europeo  más  de  100.000 productos distintos, según los datos manejados por la Sociedad Española de Neurología (SEN).

En España, la posible exposición a contaminantes químicos viene dada, en gran medida, por la utilización directa de productos químicos en el puesto de trabajo. Se estima que el 17,6 por ciento del total de los trabajadores españoles manipula contaminantes químicos y que el 22 por ciento de los trabajadores europeos inhalan humos y vapores, al menos, durante una cuarta parte de su vida laboral. En el ámbito laboral, la inhalación es la vía de absorción de sustancias neurotóxicas más frecuente.

¿Qué es un neurotóxico?

Un neurotóxico es cualquier sustancia capaz de producir un patrón constante de disfunción neuronal, cambios químicos o estructurales en el sistema nervioso. La neurotoxicidad se manifiesta con síntomas y signos que dependen de la dosis, la vía de absorción, la duración de la exposición y las variaciones individuales. Aunque la exposición a sustancias neurotóxicas de corta duración o a dosis bajas puede causar cefaleas, mareos o a otro tipo de efectos reversibles, a medida que aumenta el tiempo o la dosis de la exposición se pueden generar alteraciones neurológicas o incluso producir alteraciones morfológicas irreversibles.

La  neurotoxicidad  por  sustancias  químicas  es  un  hecho  conocido  desde hace ya mucho tiempo puesto que, como afectan con mayor frecuencia al Sistema Nervioso Periférico, sus síntomas se presentan en forma de neuropatías periféricas muy identificables tales como hormigueos, calambres, dificultad para respirar, náuseas,....  pero la afectación del Sistema Nervioso Central es menos conocida.

Aun así, en la última Reunión Anual de la SEN, el Grupo de Estudio de Neurología del Trabajo presentó una recopilación de los distintos estudios, casos y controles que se han publicado hasta la fecha. "Entre ellos, que la exposición a pesticidas se asocia a un mayor riesgo padecer Parkinson y Alzheimer y que los disolventes pueden ocasionar síntomas neuropsiquiátricos o incluso daño neuronal. También se ha descrito parkinsonismo por alta exposición al manganeso y al plomo o que la exposición a metales participa en la formación de placas seniles y en la muerte neuronal, entre otros", señala el doctor Félix Viñuela Fernández, Coordinador del Grupo de Estudio de Neurología del Trabajo de la SEN.

Prevención de riesgos laborales

Teniendo en cuenta estos aspectos y que en Europa, hoy por hoy, la mortalidad por exposición a sustancias químicas peligrosas es muy superior, en cifras, a la mortalidad por accidentes de trabajo, la SEN quiere recalcar la importancia de que todos los estamentos que configuran la prevención de riesgos laborales se impliquen aún más en su labor.

"La seguridad en el trabajo es fundamental para incrementar la competitividad y la productividad empresarial y contribuir a la viabilidad de los sistemas de protección social, ya que se traduce en una reducción del coste de los accidentes, de los incidentes y de las enfermedades, y en una mayor motivación de los trabajadores", concluye Viñuela. "Pero es también un quehacer médico  constante  en  cuanto  a  su  prevención,  identificación  y  tratamiento  de  las posibles consecuencias para la salud de los trabajadores y del medio ambiente".

De acuerdo con los resultados de la última Encuesta Nacional de Condiciones de Trabajo, las profesiones que destacan por su mayor frecuencia en la manipulación de productos químicos en el puesto de trabajo son: personal sanitario (39,4%), mecánicos, reparadores, soldadores (34,5%), agricultores, ganaderos, pescadores y marineros (30,2%) y obreros en producción industrial mecanizada (29,8%).