Etiquetado e indicaciones de seguridad para geles hidroalcohólicos

Los geles y soluciones hidroalcohólicas, al contener un alto porcentaje de etanol, son inflamables. La AEMPS publica una serie de consejos para usarlos y conservarlos adecuadamente.
gel hidroalcoholico

Los biocidas deben incluir en su etiquetado la clasificación “CLP” conforme al Reglamento 1272/2008 si alguno de sus ingredientes o una mezcla de ellos pueden ser clasificados como peligrosos y cuáles son las indicaciones y consejos que se deben tomar para evitar riesgos. 
 
Esto ocurre en el caso de los geles/soluciones hidroalcohólicos de naturaleza biocida puesto que contienen en la mayor parte de su composición etanol. Por ello, en su etiquetado deben incluir un pictograma fácilmente identificable que indique que pueden ser peligrosos y que son inflamables.  
 
Además, deben establecer una serie de indicaciones de la naturaleza del riesgo  y consejos para su uso y conservación. También por este alto contenido en etanol pueden provocar irritación ocular grave y son tóxicos en caso de ingestión. 

Los geles/soluciones hidroalcohólicos de naturaleza cosmética pueden contener una cantidad muy variable de alcohol y no tienen la obligación de incluir esta información en su etiquetado.  

Pese a ello, la Agencia Española de Medicamentos y Productos Sanitarios (AEMPS) recomienda que se sigan las mismas precauciones que con los geles y soluciones hidroalcohólicos de naturaleza biocida, y por eso ha elaborado una serie de consejos para manipularlos correctamente y poder tomar las precauciones adecuadas para su conservación: 

 
1. Evita aplicar geles y soluciones hidroalcohólicas en zonas sensibles  o dañadas de la piel y mucosas. 
 
2. Mantén los geles y soluciones hidroalcohólicas siempre alejadas de focos de calor como pueden ser superficies calientes, exposición solar directa, llamas abiertas, chispas o cualquier fuente de ignición. 
 
3. Evita fumar inmediatamente después de usar estos geles y soluciones o en lugares donde estén almacenados.   
 
4. Almacénalos en un lugar bien ventilado y fresco, evitando espacios donde se produzcan cambios de temperatura importantes. 
 
5. En caso de contacto con los ojos acláralos con abundante agua durante varios minutos. Si la irritación permanece, consulta con un médico.  
 
6. En caso de ingestión, llama inmediatamente al Servicio de Información Toxicológica o acude a un médico de urgencia.