Decálogo para cuidar nuestros pies este verano

En esta época del año es cuando más importante se hace prestar atención a la salud de esta parte tan esencial de nuestro cuerpo. Desde el COPOMA han elaborado un decálogo de pautas para cuidar nuestros pies en la época estival.

Cuidado de los pies en verano

Andar por ciertas superficies descalzos, utilizar calzados inadecuados, realizar determinadas prácticas deportivas, llevar esmaltes de uñas durante demasiado tiempo o el propio calor son tan solo algunas de las cuestiones que pueden precipitar anomalías y problemas sobre nuestros pies. Por ello, en esta época del año es cuando más importante se hace prestar atención a la salud de esta parte tan esencial de nuestro cuerpo.

Para ayudarnos a saber cómo hacerlo, desde el Colegio Oficial de Podología de la Comunidad de Madrid (COPOMA) han elaborado un decálogo de pautas para cuidar nuestros pies en la época estival:

 

  1. 1. Cuidados de higiene diaria. Lavar nuestros pies a diario es una cuestión clave en verano. Lo ideal es hacerlo con jabón neutro y secarlos bien, sin frotar bruscamente y prestando atención a la parte entre los dedos.
  2. 2. Protección e hidratación de la piel. De la mano de la higiene debe venir siempre una buena hidratación.  Usar protección solar y cremas hidratantes específicas es clave.  
  3. 3. Buena hidratación también por dentro. Beber al menos 1,5 L de agua al día es esencial tanto para nuestra piel como para nuestra salud general.
  4. 4. Evitar andar descalzos sobre ciertas superficies. En verano nos suele encantar andar descalzos, ya sea por casa para sentir el suelo frio o por la playa para sentir el agua y la arena. Sin embargo, no debemos abusar de esta práctica, pues la desprotección y un esfuerzo extra de nuestros músculos pueden causarnos ciertas lesiones.
  5. 5. Adaptar nuestro calzado a cada situación. Sobre ciertas superficies, como por ejemplo las piscinas, es necesario andar protegidos y utilizar calzados específicos. No obstante, tampoco podemos de estos calzados, como podrían ser las chanclas, en otras circunstancias.
  6. 6. Utilizar un buen calzado: Esta es una de las cuestiones más importantes siempre para el cuidado de nuestros pies. Lo ideal es que sea transpirable, de materiales naturales, que vaya sujeto al pie y que la suela sea uno o dos centímetros más alta en el tacón que en la parte delantera. Además, también es recomendable que sea flexible.
  7. 7. Materiales naturales para el contacto con la piel. En la medida de lo posible, tanto nuestro calzado como nuestros calcetines deben ser de fibras naturales. Ante todo, debemos evitar plásticos y gomas que pueden dañar nuestra piel y provocarnos heridas.
  8. 8. Prevención en las prácticas deportivas. Si vamos a realizar algún deporte, es aún más esencial calentar, estirar y utilizar el calzado correcto para evitar rozaduras y lesiones. Sobre todo, si no estamos acostumbrados a dicha práctica.
  9. 9. Cuidado de las uñas. Estamos una época muy propensa para la proliferación de hongos y otras infecciones. Por ello, debemos evitar los esmaltes permanentes y de mala calidad, así como llevarlos más de 15 días seguidos. Además, hay que cortarlas con cierta frecuencia y con un corte recto, para evitar que se claven.
  10. 10. Visitar a nuestro profesional de la Podología de confianza: acudir a consulta al menos una vez al año es clave para contar con un diagnóstico personalizado que nos ayudará a evitar problemas tanto presentes como futuros.

 

Tener en cuenta esta serie de recomendaciones nos ayudará a mantener la salud de nuestros pies y a evitar problemas que, si no se controlan a tiempo, pueden agravarse y llegar a afectar a otras partes de nuestro cuerpo o a nuestra salud general.