Intolerancia al gluten

Cuidar la dieta y consultar periódicamente al profesional sanitario es esencial para un buen control de la enfermedad celíaca

Llevar una dieta estricta de alimentos sin gluten, vigilar los excipientes de los medicamentos que se utilicen y visitar periódicamente al profesional sanitario en función de la evolución física son algunas de las principales recomendaciones para que las personas celíacas puedan evitar problemas de salud. Estos consejos son algunos de los que se incluyen en la última entrega de la serie Recomendaciones SEFAC a la población, dedicada a identificar y tratar la celiaquía, realizada por la Sociedad Española de Farmacia Comunitaria (SEFAC) y reconocida de interés sanitario por el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.

La enfermedad celíaca o celiaquía es una patología en la que una intolerancia permanente a los alimentos que contienen gluten (proteína que se encuentra en la semilla de los cereales como el trigo, la cebada y el centeno) afecta a las vellosidades del intestino delgado y puede provocar daños en la correcta absorción de los nutrientes que contienen los alimentos y generar estados carenciales que pueden desembocar en la aparición de ciertas manifestaciones clínicas.

Conviene subrayar que hablamos de una intolerancia y no de una alergia, es decir, en la celiaquía la ingestión de ciertos alimentos no produce una reacción inmediata por parte del organismo, sino que provoca daños en determinadas zonas del intestino que causan síntomas más inespecíficos, lo cual confunde y retrasa su detección y eleva el porcentaje de casos no diagnosticados. En España la enfermedad celíaca afecta a una de cada cien personas de todas las edades, tanto a niños como a adultos, y esta proporción es dos veces más frecuente en las mujeres que en los hombres.

Recomendaciones

  • LA ENFERMEDAD CELÍACA NO SE PUEDE PREVENIR, porque la causa exacta no se conoce. Por tanto, el mejor modo de afrontarla es ser consciente de los factores de riesgo, sobre todo tener un familiar con este trastorno, y consultar con su médico o farmacéutico al menor síntoma de presencia injustificada de alteraciones digestivas, lo cual puede ayudar a su diagnóstico precoz, a un mejor tratamiento y a una mayor calidad de vida.
  • Aunque usted sospeche que puede padecer enfermedad celíaca, NO INICIE UNA DIETA LIBRE DE GLUTEN antes de que le realicen las pruebas de diagnóstico, ya que podría alterar el resultado de dichas pruebas.
  • LA ENFERMEDAD CELÍACA NO SE PUEDE CURAR. A pesar de todo, los síntomas desaparecerán y las vellosidades que recubren el intestino delgado mejorarán si usted sigue una dieta libre de gluten de por vida.
  • A partir de esta premisa, ES FUNDAMENTAL CONOCER EL LISTADO DE ALIMENTOS QUE NO TIENEN GLUTEN y que, por tanto, puede consumir con tranquilidad, que son: leche y derivados (quesos, requesón, nata, yogures naturales y cuajada); todo tipo de carnes y vísceras frescas, congeladas y en conserva al natural, cecina, jamón serrano y jamón cocido; pescados frescos y congelados sin rebozar, mariscos frescos y pescados y mariscos en conserva al natural o en aceite; huevos; verduras, hortalizas y tubérculos; frutas; arroz, maíz y tapioca, así como sus derivados; todo tipo de legumbres; azúcar y miel; aceites y mantequillas; café en grano o molido, infusiones y refrescos; toda clase de vinos y bebidas espumosas; frutos secos crudos; sal, vinagre de vino, especias en rama y grano y todas las naturales.

  • Del mismo modo, DEBE ASEGURARSE DE QUE CONOCE Y SABE DIFERENCIAR LOS ALIMENTOS CON GLUTEN para evitarlos en su dieta salvo que en su etiquetado se indique lo contrario. Éstos son: pan, harinas de trigo, cebada y centeno y productos que los contengan; bollos, pasteles, tartas, galletas, bizcochos y demás productos de pastelería; pastas (tallarines, macarrones, fideos, etc.) y sémola de trigo; bebidas malteadas y bebidas destiladas o fermentadas a partir de cereales: cerveza, agua de cebada, algunos licores, etc.; algunos aderezos para ensaladas, salsas y panes de comunión.
  • DEBE TENER TAMBIÉN MUCHA PRECAUCIÓN con algunos alimentos que pueden contener gluten, como son: embutidos y otros productos de charcutería; patés diversos; yogures de sabores o con trocitos; quesos fundidos o en porciones; conservas de carnes y de pescado; caramelos y gominolas; sucedáneos de café; frutos secos fritos y tostados; helados, y colorante alimentario.
  • A LA HORA DE REALIZAR LA CESTA DE LA COMPRA debe leer el etiquetado del producto elegido para descartar la presencia de gluten y, además, comprobar que la información que contiene la etiqueta se ajusta a la "Lista de alimentos aptos para celíacos" que periódicamente elabora la Federación de Asociaciones de Celíacos de España (FACE).
  • Como no siempre es posible que el paciente celíaco coma en su propia casa, asegurándose de tomar todas las precauciones necesarias que le garanticen la ausencia de gluten en su dieta, es muy importante que ADVIERTA DE SU CONDICIÓN DE CELÍACO EN SITUACIONES DIVERSAS como: comedores escolares o de empresas, restaurantes, hoteles, hospitales, etc., de modo que puedan adaptar los alimentos que le sirven a su situación.
  • Si usted es un paciente celíaco, tenga en cuenta que MUCHOS MEDICAMENTOS PUEDEN INCLUIR EN SU COMPOSICIÓN EXCIPIENTES QUE CONTENGAN GLUTEN. Adviértalo a su médico cuando le vaya a prescribir cualquier tratamiento así como al farmacéutico en el momento de la dispensación. No obstante, usted mismo puede comprobar la existencia de gluten entre los excipientes de un medicamento. Bastará con que lea el prospecto o el material de acondicionamiento, en los que es obligatorio por ley que se mencione tal circunstancia como advertencia.
  • NO VIVA ESTE PROBLEMA EN SOLEDAD. Contacte con las asociaciones de celíacos existentes en España. En ellas le ofrecerán asesoramiento, responderán a sus dudas y podrá compartir sus experiencias con otros pacientes celíacos. De esta forma la enfermedad no supondrá un obstáculo en su vida cotidiana.

FUENTE: Sociedad Española de Farmacia Comunitaria (SEFAC).